La portabilidad financiera le hace más fácil a los consumidores cambiarse de una institución con la que ya se tiene un producto o servicio (como un crédito hipotecario) a otra entidad que ofrezca mejores condiciones.

Aunque la normativa entró en vigencia en septiembre de 2020, todavía hay muchas personas que no tienen claros los beneficios de la portabilidad financiera. Si estás en esta situación, aprovecha para conocer las ventajas de la Ley de Portabilidad en esta nota, y cómo este proceso te puede ayudar a ahorrar dinero.

¿Qué es la Ley de Portabilidad Financiera?

La Ley de Portabilidad Financiera busca promover la sana competencia en el mercado y darle más recursos a los consumidores para que ejerzan sus derechos. Se trata de simplificar el traspaso de uno o más productos financieros entre bancos, cajas de compensación y otras entidades contempladas como parte de la ley, entre ellas:

  • Compañías de Seguros.
  • Agentes Administradores de Mutuos Hipotecarios.
  • Cooperativas de ahorro y crédito.
  • Instituciones que otorgan créditos automotrices.
  • Emisores de tarjetas.

El tipo de producto que puedes traspasar también es muy amplio, pudiendo elegir los siguientes:

  • Cuentas corrientes.
  • Cuentas vistas.
  • Créditos automotrices.
  • Créditos hipotecarios.
  • Tarjetas de crédito.
  • Líneas de crédito asociadas a una cuenta.

Incluso, tienes la libertad de cambiarte de un tipo de institución a otro, ya que puedes pasar de un banco a una caja de compensación o viceversa.

Beneficios de la portabilidad financiera

En primer lugar, con la portabilidad puedes ahorrarte mucho dinero a largo plazo y facilitar el refinanciamiento.

Por ejemplo, si refinanciar un crédito hipotecario normalmente te cuesta más de $560.000, la portabilidad puede reducir los costos en más del 50%, por el límite en cobros de notarías y conservadores de bienes raíces (sumado a la reducción en los aranceles) por este trámite.

Cuando el refinanciamiento es para créditos hipotecarios de UF 1.000, los gastos se reducen de $700.000 a $280.000. Los tiempos de tramitación también se agilizan, siendo posible ahorrarse unos 30 días de espera.

Por otro lado, como parte del proceso de portabilidad puedes solicitarle una oferta a todas las entidades a las que te interesa mover tus productos o servicios. En este documento podrás analizar cuál es la opción que más te conviene, incluyendo detalles como la cuota mensual y el interés.

El proceso es muy sencillo, ordenado y amigable, para que tengas toda la información que necesitas antes de tomar una decisión. Otros beneficios importantes que te ofrece la portabilidad son:

  • Está disponible para cualquier persona que tenga productos o servicios financieros activos, sea natural o jurídica. En este último caso, debe tratarse de micro o pequeñas empresas, es decir, negocios cuyas ventas anuales sean inferiores a UF 25.000.
  • Puedes traspasar todos los productos que quieras, sean o no del mismo proveedor.
  • Si el monto del capital es igual o menor al monto original, no debes pagar ningún recargo en la notaría ni al conversador de bienes raíces.
  • Puedes incluir todos los productos que deseas portar en una misma solicitud, con lo cual ahorras tiempo en el proceso.
  • Tú decides qué productos quieres migrar y cuáles quieres conservar. No estás obligado a traspasarlos todos.

Para iniciar el proceso de portabilidad, solo tienes que ponerte en contacto con la institución a la que deseas traspasar tus productos y solicitar una oferta.